Las fiestas de fin de año son momentos especiales para celebrar con amigos y familia, cerrar ciclos y dar la bienvenida a nuevas etapas. El espíritu de celebración se acompaña, la mayoría de las veces, con un brindis tras otro, tras otro, tras otro… Por eso, es importante analizar cómo el alcohol puede influir en nuestras decisiones, en especial cuando se trata de la salud sexual.

El alcohol tiene la capacidad de disminuir las inhibiciones y nublar el criterio. Durante las fiestas, esto podría llevar a comportamientos de riesgo, como tener relaciones sexuales sin condón o ceder ante prácticas que ponen en peligro tu integridad física. Estas acciones aumentan la probabilidad de adquirir infecciones de transmisión sexual (ITS), que pueden prevenirse si tomas las precauciones adecuadas.

 

Anticípate a la acción

Disfrutar de una copa no es un problema; las cantidades exageradas de alcohol sí pueden llegar a serlo. Por ejemplo, beber en exceso puede nublar la memoria, haciendo difícil recordar si usaste condón o incluso si hubo un encuentro sexual. En las fiestas de fin de año, donde el ambiente alegre suele ser más relajante, este riesgo puede ser mayor.

Anticiparte a lo que pueda pasar es una buena idea para no exponerte a riesgos. Si planeas beber, lleva contigo condones y lubricante. No importa si estás en una reunión íntima o en una fiesta grande, este sencillo paso puede hacer una gran diferencia. Nunca sabes qué oportunidades pueden surgir, y con estas herramientas podrás aprovecharlas si así lo deseas.

 

Te diviertes más si te cuidas de las ITS

Hablar de manera abierta con tu pareja, ya sea ocasional o estable, antes de consumir alcohol puede ayudar mucho. Comunicarse ayuda a establecer acuerdos sobre el uso de condones y a reafirmar el consentimiento mutuo, elementos fundamentales para cualquier encuentro sexual. Hablar sobre salud sexual no tiene que ser incómodo, sino una muestra de confianza, honestidad y respeto.

Si con el correr de las horas sientes que el alcohol está afectando tu capacidad de tomar decisiones, detente y busca apoyo. Acércate a amigos de confianza que puedan ayudarte a mantenerte tu seguridad. Tal vez es el momento de soltar la bebida y buscar agua o café para disminuir la embriaguez.

 

Si tu memoria se borró, hazte pruebas de ITS

Cuando bebiste de más, al otro día sólo te quedan breves recuerdos de la noche, difusos y fugaces como flashes en tu memoria. Si sospechas que pudiste haber estado en riesgo de adquirir una ITS, tómalo con calma. En caso de que tu memora se haya borrado por completo, habla con amigos o familiares que puedan contarte lo que pasó; esto será más fácil que llamar a tu ligue de la fiesta y que se entere de que no recuerdas nada de lo que hicieron.

En todo caso, toma en cuenta que muchas de las ITS son tratables, y es mucho mejor detectarlas pronto. Considera hacerte pruebas de detección y consulta con un profesional de salud para saber en qué momento es mejor hacer cada una de ellas. Como sabes, para la prueba del VIH se recomienda esperar tres meses a partir del contacto sexual de posible riesgo, pero hay otros exámenes que puedes hacerte mucho antes.

En estas fiestas de fin de año, proteger tu salud sexual no te resta diversión, sino que añade seguridad y tranquilidad a tus celebraciones. Recuerda que cuidarte en AHF México realizamos pruebas gratuitas de VIH y otras ITS, sólo acércate a alguno de nuestros centros o escríbenos por Whatsapp y haz una cita hoy.

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